Buenos días mis estimados amig@s, ¿cómo estáis? Hoy me apetece reflexionar
sobre un enemigo mortal... el aburrimiento. Me refiero a cuando sentimos la
vida como un vacío, y a la vez como un peso que nos ancla y roba la ligereza
que debe ser sentir que SOMOS, cuando la actividad que estamos realizando o no
realizando nos deja en un estado de apatía, tedio, indiferencia, desgana,
inapetencia, sopor... ponle el nombre que quieras, el sentimiento es el mismo.
Es en esos momentos cuando una alarma debe resonar dentro de nosotros, nos está
alertando de que algo debe ser cambiado, pues estamos perdiendo el gozo y la
alegría del vivir, del existir y del ser.
Donde la ilusión, la pasión, la motivación, la esperanza, el ánimo, la
confianza, el compromiso, la atención, la creatividad... han huido y de tan
vacío y hueco que te sientes, no puedes ni levantarte por el peso que
arrastras... pues la vida contra más vacía, más pesa. Amigo, vamos a darle la
vuelta... aprendamos que nos está diciendo y que necesita ser transformado. No
dudes ni un momento que el aburrimiento te está indicando que algo necesita ser
urgentemente transformado. Es un semáforo en ámbar que te está alertando que es
hora de soltar, de dejar ir... has perdido interés, no hay aportación nueva,
estás obedeciendo, repitiendo lo mismo, has perdido aliciente, y has dejado de
ser tú mismo, estás desconectado. Estás en la zona de seguridad haciendo una y
otra vez lo mismo, y eso aburre, empequeñece y encoge.
La vida nos pide cambio, movimiento, acción, salir de la zona de confort
que al final es apego al pasado y experimentar la vida, vivirla intensamente.
Deja las quejas y lamentos a un lado y actúa... sacúdete la pereza, la
desesperanza, la auto-compasión... ahí no hay crecimiento ni plenitud...Busca
lo que te motiva, lo que te ilusiona, por ahí estarán tus dones y talentos.
Pregúntate qué te apasiona. Siente la vida correr por tus venas y atrévete a
ser feliz, te lo mereces. El arte de vivir contigo mismo y ser el único dueño
de tu destino. Es tu gran poder, y conlleva una gran responsabilidad. Asúmela,
ya que nadie lo podrá hacer por ti, despliega tus alas, y échate a volar...
siempre han estado contigo, pues eres un ángel, solo que no lo has sabido hasta
ahora... Será nuestro secreto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario