La voz de tu conciencia (solución)
La fórmula es sencilla
que no simple: SÉ TÚ MISMO.
Libérate de la pesada carga de juzgar
a nadie, se
consecuente con tus
acciones y
consciente de ellas.
Expulsa de tu corazón todo lo
negativo, y
no critiques porque
la crítica es como el humo, deja
ennegrecido
todo lo que toca.
Alinea pensamiento, sentimiento,
emoción y acción para encontrar
la solución, actúa
como pienses y
sientas desde
la honestidad y bondad.
Las personas se definen por sus actos,
no por sus palabras, di sí cuando quieras
decir sí y di
no cuando así lo sientas sin
importarte lo que piensen los demás,
solo lo que tú pienses de ti mismo,
eso se llama integridad.
Recuerda que el dinero y los objetos
materiales de este mundo no son
un fin sino un medio, por tanto
no te llevarán a la felicidad por sí solas.
La verdadera riqueza se encuentra
en nuestro
interior, la puedes observar en
aquellas personas que irradian luz con su
presencia, eso no se puede comprar, hay
que trabajárselo con fuerza de voluntad.
Aplícate lo de yo gano porque los demás
ganan y así
el agradecimiento sincero
de tu alma
buscará hacerse un hueco para
salir y
hacerse consciente... la notarás en
tu garganta
porque pronunciarás
alto y claro...
GRACIAS...
¿Ves...? Ya has empezado a sonreír...
Continúa practicando y llegará un día
en que al mirarte en el espejo, verás a
una persona agradecida, dichosa, plena,
humilde, afortunada y próspera.
Y vas perdiendo peso, vas soltando
lastre, cada
día te vuelves más ligero
y ya nada ni
nadie te detiene, estás
en el buen
camino. Ya no te duele
el alma, lo
puedo ver en tus ojos.
Bienvenido hermano, vamos,
continuemos ascendiendo por la
montaña de la
vida, sigamos dando
vueltas a la espiral vital, no será fácil
pero ahora ya sabes cómo hacerlo.
